Tres veces, en los meses de junio, julio y agosto de 1476 estuvo el rey don Fernando el Católico en Vitoria. Al partir de ella dejó en la ciudad a los doctores del Consejo Real Juan Diaz de Alcocer y Micer Azamar para tratar de la extinción de los bandos, asesorados por el licenciado Diego Martinez de Alava y por el bachiller Miguel Perez de Oñate sobre el estado de la ciudad. Entonces, deseando remediar los males que Vitoria padecía, acordaron los vecinos, por consejo de los juristas del rey, apartarse de parentelas, bandos y apellidos. Tras de haberlo jurado solemnemente en San Miguel y en San Pedro, los doctores, el licenciado y el bachiller redactaron unos capitulos que los vecinos loaron, aprobaron y pidieron al rey que les otorgara su refrendo.
Se suprimían en ellos los apellidos y parcialidades para llamarse "vitorianos" todos los vecinos de la ciudad "por ser este su apellido honrado" del que se habian preciado sus antecesores, y rogaban al rey que les levantase las obligaciones, promesas, juramentos y pleitos homenajes que tenían hechos en tiempos de tales bandos.
Pedían también al rey que para quitar la memoria de linajes y extirpar discordias y diferencias, hubiera en el concejo sólo un alcalde, dos regidores, un procurador, un merino, dos alcaldes de Hermandad cada seis meses y un escribano, elegidos el día de San Miguel para ejercer sus oficios hasta el mismo día del año siguiente.
https://es.wikipedia.org/wiki/Calleja_(bando)
La elección había de realizarse en la iglesia de San Miguel con arreglo a las normas establecidas en el Capitulado.