viernes, 20 de abril de 2012

IGNACIO HIDALGO DE CISNEROS LÓPEZ MONTENEGRO

Nació en Vitoria en 1894
Hijo del segundo matrimonio de Ignacio Hidalgo de Cisneros Unzeta con María López-Montenegro González de Castejón, nació en la calle de la Estación. Pionero de la aviación estuvó destinado en Marruecos. Participó en la fracasada sublevación anti-monárquica de Cuatro Vientos siendo obligado por ello a partir hacia su primer destierro que compartió entre otros con Ramón Franco, Indalecio Prieto y José Mártinez de Aragón. Participó en la fiesta del primero de mayo de 1931 en Vitoria. Al comenzar la guerra civil era teniente coronel y terminó como general en jefe de la Aviación repúblicana. Colaboró con Radio España Independiente.
Poco antes de morir daba a la imprenta unas interesantes memorias desde su nacimiento hasta el final de la guerra civil que con el título de Cambio de rumbo (1977) fueron publicadas con prólogo de M. Tuñón de Lara. Dos volúmenes en los que se aprecia tres niveles diferentes y, por consiguiente, permiten tres lecturas: la personal, la sociológica y la histórica -ésta muy discutible, aunque fuera escrito por un observador privilegiado de los acontecimientos que narra-. Las tres se articulan e incluso se interfieren. A lo largo del relato, rememora su infancia y adolescencia en la capital alavesa, su ingreso en el ejército, su destino a Marruecos y la toma de Alhucemas, su experiencia personal en el Sáhara Occidental y en Melilla, su participación en la sublevación de Cuatro Vientos, el exilio parisino, los primeros años de la Segunda República, su matrimonio con una aristócrata divorciada (Constancia de la Mora Maura), agregado aéreo en la Italia bajo la férula de Mussolini, su actividad como segundo jefe del aérodromo de La Tablada... Desempeñó un papel destacado en la organización de la aviación republicana durante la contienda. A finales de 1936 ingresa en el Partido Comunista, donde llegará a ser miembro de su Comité Central.
Cuenta su versión, acontecimientos decisivos para la guerra fraticida, hasta su segundo y definitivo exilio. Largo peregrinaje que le llevó a recalar en México, y en diversos países europeos: Francia, Rusia, Polonia, Rumanía.. "Nunca ha sido mi intención escribir estas lineas, hacer un relato de los horrores que se cometieron..., pues estoy convencido de que no ganamos nada los españoles con ahondar las heridas que aquellos produjeron". En el capítulo titulado Infancia y adolescencia dedica entrañables páginas a sus primeros pasos en tierra donde viera la primera luz. El 29 de octubre de 1994 se procedió a la inhumación de sus restos en el panteón familiar del cementerio de Santa Isabel de su ciudad natal.
Murió el 9 de febrero de 1966 en Bucarest
Bibliografía
Alfaro Fournier, T. Una ciudad desencantada. Segunda parte. Diputación de Álava. Vitoria-Gasteiz, 1995
Hidalgo de Cisneros, I. Cambio de rumbo. Laertes. Barcelona. 1977. 2 volúmenes
Hidalgo de Cisneros Alonso, I. "La inhumación de los restos de Ignacio Hidalgo de Cisneros. Landazurí. (Vitoria-Gasteiz), núm 4, abril, 1995
Martínez Salazar, A. "Andanzas alavesas de Ignacio Hidalgo de Cisneros" Deia. 18-VI-1991.
Morillas, J. " Sobre Hidalgo de Cisneros y el desarrollo de las comunicaciones en el África Occidental". Estudios Africanos. Vol. IV. núm 7, (Madrid), julio-diciembre, 1989, pp. 87-95

Sacado del libro "100 alaveses" de Ángel Martínez Salazar. Ayuntamiento de Vitoria-Gasteiz. 1999

domingo, 1 de abril de 2012

ROMANCERO PAISANO



Plaza Mayor: una historia
familiar entre alaveses
Desde sus torres, baluarte
de hornacinas y ajimeces,
amén de Fueros jurados,
la Villa cimera tiende
su vuelo, como paloma,
sobre la campiña verde.

Es primavera y ensaya
flores abril. Atardece.
Hay un rumor de sedientas
cerámicas en la fuente.
Giran ruedas de canciones
infantiles y trascienden
bellas palabras, preludio
de amores adolescentes.

Fluyen por rúas gremiales
destinados a entenderse
los barbados artesanos,
los aprendices imberbes,
en tanto que alcabaleros
alternan con mercaderes,
y el gañán ronda la siembra,
como el letrado sus leyes.

Súbito irrumpe la Posta
de campanillas alegres,
y su danza trepidante
se desmaya en el Alberge
de la Gran Plaza. Testigos
clérigos y feligreses,
al son del bronce, en el atrio
de San Miguel compadecen.

Rosas aladas ofrendan
a la Virgen de las Nieves
suplicantes voces blancas,
voces graves reverentes.
Y en la noche, un misterioso
claro de luna convierte
al romántico viajero
de soñador en vidente.

Templo y hogar, lonja y coso
de leales y aun corteses,
los que en su lucha aprendieron
a derrotar, para siempre,
la iniquidad con justicia,
con audacia al prepotente...
De "Villa-Suso" a las "Cercas"
ésta es "Victoria que vence"

Sacado del libro "VUELOS Y CELAJES. ANTOLOGÍA POÉTICA" de Luis Rey Altuna. Ayuntamiento de Vitoria-Gasteiz. 1999
 
ga.js